Los hongos en la boca suelen ser la señal de que hay una infección en curso causada por algún tipo de microorganismo. Normalmente suele tratarse de levaduras que se alojan en la lengua, en la garganta o en cualquier zona del interior de la cavidad bucal.
Por lo general suelen ser infecciones leves por las que no hay que preocuparse demasiado aunque siempre hay que acudir al médico para poder aplicar el tratamiento adecuado cuanto antes y evitar posibles complicaciones.
ÍNDICE DE CONTENIDO
Causas de los Hongos en la Boca
Existen distintas causas por las que pueden llegar a aparecer hongos en la boca. En ocasiones, son alteraciones del propio organismo las que provocan que los hongos puedan comenzar a desarrollarse. Otras veces, los propios hábitos de vida del paciente son los que favorecen la aparición de los hongos.
Las principales causas de los hongos en la boca son:
- Inmunodeficiencia. Cuando el cuerpo tiene sus defensas reducidas notablemente, los hongos pueden desarrollarse con una gran facilidad debido a que el organismo no pueden defenderse de forma adecuada.
- Diabetes. Los altos niveles de azúcar en la sangre se manifiestan también en la saliva. Esto hace que la saliva se convierta en un nutriente perfecto para el hongo Candida.
- Disfunción de las glándulas salivales. Si las glándulas encargadas de producir la saliva no funcionan adecuadamente, se produce sequedad en la boca. Los hongos proliferan rápido ya que la saliva contiene sustancias antifúngicas como, por ejemplo, las histatinas, que en este caso son escasas.
- Desnutrición. Los hongos se reproducen con mucha facilidad si falta el hierro, los folatos o vitaminas como la A y la B12.
- Alcoholismo y consumo excesivo de tabaco.
- Consumo de corticosteroides o tratamientos antimicrobianos.
- Hipotiroidismo u otro tipo de cambios hormonales que alteran el organismo como, por ejemplo, el organismo.
- Recién nacidos. Son muy susceptibles a tener hongos en la boca debido a que su floral bucal y el PH de su saliva todavía tienen niveles bajos.
- Quimioterapia y radiación. Este tipo de tratamientos son muy agresivos para el sistema inmunológico así que hacen que las defensas bajen y el organismo sea más susceptible a la proliferación de los hongos.
- VIH y leucemia. Este tipo de infecciones afectan directamente a las defensas del cuerpo por lo que los hongos tienen mucha más facilidad para desarrollarse.
- Dentadura postiza. Si no se tienen en cuenta las correctas medidas de higiene bucodental cuando se lleva dentadura postiza, es posible que aparezca una infección.
- Tratamientos antibióticos. Este tipo de medicamentos suelen reducir las defensas del organismo y, por tanto, facilitar el desarrollo de los hongos bucales.
- Hipertrofia de las papilas. Cuando existen malformaciones en las papilas de la lengua, éstas no pueden realizar su función de mantener controlados a los microbios y favorecen la aparición de hongos.
- Higiene bucal insuficiente. La falta de aseo bucodental provoca que se desarrollen los hongos.
- Estrés. Los cambios emocionales bruscos son muy perjudiciales porque hacen que el organismo absorba con más rapidez las bacterias y los hongos.
Síntomas de los Hongos Bucales
Los síntomas de los hongos bucales pueden llegar a ser muy variados y en ocasiones incluso cambian según el paciente. Además, también dependen del avance que haya tenido la infección en la boca.
Los síntomas más habituales de los hongos bucales son:
- Dolor en la cavidad bucal que suele centrarse sobretodo en la garganta y en la lengua.
- Dificultad para tragar y, en ocasiones, también para hablar.
- Encías inflamadas
- Sensación de picor dentro de la cavidad bucal
- Sangrado abundante después de haberse cepillado los dientes. Leer artículo sobre Sangrado de las Encías
- Placas en la lengua, en la garganta o en el interior de la boca. Pueden aparecer de color blanquecino, amarillento o verdoso, dependiendo del tipo de infección que los haga provocado. Cuando se retiran estas placas, suelen aparecer sangrado.
- Llagas o lesiones más profundas de color rojo sin presencia de placas.(Te recomendamos leer nuestro artículo sobre las llagas en la boca)
- Grietas en las comisuras de los labios y en la boca que, en ocasiones, pueden llegar a abrirse y sangrar.
- Protuberancias blancas. Aparecen en la lengua y en la parte interna de las mejillas y son señal de que la infección que ha causado los hongos ha sido provocada por el hongo Candida albicans, que suele vivir en la cavidad bucal sin causar inconvenientes hasta que alguna de las causas anteriores hace que comience a desarrollarse de forma anormal provocando entonces la infección conocida como candidiasis oral, una de las más habituales en los casos de hongos en la boca.
- Inflamación de la lengua
- Inflamación de los ganglios linfáticos del cuello
- Mal aliento
- Mal sabor de boca
En ocasiones, el médico querrá realizar análisis adicionales de sangre para comprobar los niveles nutricionales del organismo en caso de que pueda sospechar que puede ser una causa para la aparición de los hongos en la boca. Por último, si el tratamiento no tiene los efectos deseados, el doctor puede realizar una biopsia de los tejidos afectados para hacer un estudio más profundo.
Tratamientos para los Hongos en la Boca
Es preciso iniciar el tratamiento cuanto antes para evitar complicaciones; por ello hay que ir al médico cuando aparezcan los primeros síntomas y molestias. Por lo general, el tratamiento consiste en la toma de antimicóticos orales.
Cuando el paciente es un adulto, es habitual recetar enjuagues bucales de niastina, recurriendo al antimicótico sistémico en los casos en los que la infección es bastante profunda. Los antimicóticos no son aptos para mujeres embarazadas ni durante la lactancia, ni tampoco para bebés de menos de seis meses de edad. Suelen ser medicamentos bastante fuertes cuya toma debe estar supervisada por un especialista incluso cuando los toman individuos fuertes y sanos.
De la misma forma hay que tomar ciertas precauciones ya que los antimicóticos pueden provocar caries dental debido a los carbohidratos fermentables que contienen. Se puede evitar realizando enjuagues bucales con flúor sin alcohol durante dos o tres minutos una vez al día.
Estos tratamientos suelen durar entre una y tres semanas y es muy importante seguir las recomendaciones del médico y no interrumpir el tratamiento aunque desaparezcan los síntomas. La efectividad del tratamiento siempre dependerá del estado del sistema inmunológico del paciente pues si es débil, es muy probable que la infección reaparezca al poco tiempo.
Remedios Caseros para quitar los Hongos en la Boca
Es muy importante que el sistema inmunológico esté fuerte no solo para evitar contraer las infecciones que provocan los hongos en la boca sino también para, una vez que han aparecido, facilitar que el cuerpo pueda defenderse y llegar a la curación con más rapidez.
Un remedio casero para esto es comer un ajo diario o mantener medio ajo en la boca durante algunos minutos cada día. El yogur es otro producto muy beneficioso para el sistema inmunológico, especialmente cuando se trata de niños, aunque hay que tomarlo siempre sin azúcar. El aloe vera y los enjuagues con aceite de árbol del té también son productos útiles para fortalecer las defensas naturales del cuerpo.
A la hora de cepillarse los dientes es recomendable usar un cepillo de cerdas suaves para evitar así raspar las lesiones y correr el riesgo de extender la infección. También es importante no utilizar el cepillo que se usa habitualmente mientras existan los hongos en la boca ya que podría volver a reaparecer la infección al utilizarlo. No se recomienda usar enjuagues bucales ni aerosoles que puedan contribuir a extender los hongos a otras zonas de la boca.
La infusión de orégano también es un remedio muy apropiado para los hongos en la boca así como los enjuagues con bicarbonato de sodio, sal o agua oxigenada disueltos en agua tibia. Así mismo, el aceite del árbol del té y el vinagre de manzana pueden emplearse como colutorios para ayudar a eliminar los hongos en la boca.
El propóleo y el laurel son una buena combinación para enfrentarse a los hongos bucales. Simplemente hay que hacer una infusión de laurel a la que se añadirán algunas gotas de propóleo y una vez que se haya enfriado, aplicar la mezcla con un algodón en las zonas afectadas.
Para aliviar las molestias que producen los hongos en la boca, es recomendable tomar alimentos fríos, blandos y que sean fáciles de tragar.
Si te ha gustado este artículo sobre los Hongos en la Boca te recomendamos que leas nuestra categoría sobre las enfermedades de la boca, a continuación te dejamos algunos artículos que probablemente te gustaría leer: