Por lo general, los resfriados, las alergias o la gripe son los causantes de la aparición de flemas en la garganta, una afección molesta y también desagradable para mucha gente que busca soluciones para expulsar la flema. Por suerte, existe toda una serie de remedios naturales muy eficaces para eliminar las flemas en la garganta y recuperar la normalidad.
Sin embargo, si las flemas tardan en desaparecer y se acompañan de otros síntomas como fiebre, dolor o dificultad para respirar, es necesario acudir al médico para que éste determine si hay alguna causa más grave detrás de la acumulación de mucosidad en la garganta.
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Por qué se produce Flemas en la Garganta
La flema es el resultado del exceso de producción de mocos que hace que éstos resbalen por la parte posterior de la garganta. Este goteo posnasal no solo es responsable de las flemas en la garganta sino también de la irritación de la misma y de la aparición de la tos.
Los cambios hormonales durante el embarazo pueden provocar un aumento en las secreciones nasales durante el primer trimestre
Algunas de las causas más frecuentes para su aparición son:
- Gripe o resfriado
- Bronquitis. La inflamación de los bronquios acaba provocando exceso de flema, que aparece junto a otros síntomas como el picor de garganta o la sensación constante de que hay algo atrapado en la misma.
- Alergia. Sin importar cuál sea el agente que provoca la alergia, la mayoría de ellas tiene como uno de sus síntomas la producción excesiva de moco y por tanto, la aparición de flemas. Aunque por lo general la mucosidad se concentra en la nariz, suele ser normal que acabe deslizándose hacia la garganta.
- Tabaco. El humo del tabaco es uno de los agentes externos más agresivos para el organismo y en especial, para el sistema respiratorio. Esto hace que favorezca la aparición de flemas en la garganta.
- Infecciones en el aparato respiratorio. Sinusitis, amigdalitis, laringitis, faringitis, neumonía…
- Reflujo gastroesofágico. Los ácidos del estómago, al subir de nuevo, pueden provocar irritación en las mucosas de la garganta.
- Pólipos nasales
- Desviación del tabique nasal
- Exceso de lácteos en la dieta así como café, té, azúcar y sal
8 Remedios Caseros para Quitar las Flemas de la Garganta
Siempre que se produce algún tipo de afección en el organismo, aunque sea algo inocuo como las flemas en la garganta, es necesario acudir a la consulta del médico para que sea éste quien nos confirme que realmente no se trata de algo más grave. Si las flemas se mantienen durante más de tres días y presentan una coloración verdosa o amarillenta, hay que acudir obligatoriamente al médico, especialmente si hay dificultades para respirar, fiebre y dolor de garganta.
Es importante toser cuando se sienta la presencia de flemas y evitar tragarlas
El médico puede recetar medicinas o recomendar la compra de medicamentos de libre dispensación en farmacias pero, además, también existen algunos remedios caseros para expulsar las flemas de la garganta que son realmente útiles y sencillos.
En el caso de acudir directamente a la farmacia hay que tener cuidado de no adquirir un medicamento para la tos seca ya que agravará la situación de las flemas en la garganta. Hay que advertir al farmacéutico acerca de la presencia de las flemas para que nos proporcione el remedio adecuado.
Al margen de estos remedios, se deben seguir otras recomendaciones como dejar de fumar, dormir con la cabeza ligeramente elevada, ventilar bien las estancias en las que se viva habitualmente y procurar respirar aire limpio.
Gárgaras con agua y sal
Hacer gárgaras es un remedio sencillo y que ayuda a aliviar la irritación que se produce en la garganta gracias a la sal que ayuda a atraer el agua a las paredes de la misma. De esta forma, se crea una barrera que hidrata la garganta y que la protege de agentes externos como el polvo que puede provocar la aparición de más mucosa.
El procedimiento para realizar gárgaras con agua y sal es muy sencillo:
- Disolver una cucharadita de sal en medio vaso de agua tibia
- Introducir un poco de la mezcla en la boca e inclinar la cabeza hacia atrás procurando no tragar el agua
- Hacer gárgaras durante unos treinta segundos y escupir
- Repetir hasta que se termine el agua
El alivio que procura este remedio es prácticamente instantáneo por lo que se puede repetir hasta cuatro o cinco veces al día.
Aceite de eucalipto
El aceite de eucalipto tiene una doble función pues además de liberar la flema de la garganta y abrir las vías respiratorias despejando el camino del aire, alivia la irritación de la garganta eliminando así el malestar que produce la acumulación de mucosa.
La forma de usar este aceite esencial es mezclarlo con un poco de aceite de coco y restregar la mezcla por el pecho. Aunque al principio este método puede provocar algo de tos, enseguida ésta cesa y tanto la irritación como la inflamación de la garganta van desapareciendo.
Té de limón con miel
El limón es muy eficaz para estos casos ya que ayuda a romper la secreción de moco por lo que las flemas en la garganta se deshacen al hacerse líquidas, siendo más fáciles de eliminar. La miel, por otro lado, crea una capa protectora en la garganta que reduce la irritación de la mucosa. Este té, por lo tanto, es perfecto para eliminar esa incómoda sensación de tener algo atrapado en la garganta.
Esta mezcla se prepara de la siguiente manera:
- Agregar dos cucharadas de zumo de limón en una taza de agua hirviendo.
- Añadir una cucharada de miel
- Mezclar y beber cuando la mezcla esté tibia
Jarabe de miel con berro
En casa también podemos preparar nuestro propio jarabe para expulsar flemas de una forma fácil. La receta de este jarabe casero es la siguiente:
- Preparar 250 mililitros de zumo de berro usando una licuadora.
- Agregar una taza de miel y poner a fuego lento hasta que tenga consistencia de jarabe
- Una vez que la mezcla se enfríe, añadir cinco gotas de propóleo
Se puede tomar una cucharada de este remedio hasta tres veces al día como si se tratara de un jarabe normal. Una vez que desaparezcan las flemas, no hace falta seguir tomándolo.
Nebulizaciones
Las nebulizaciones son perfectas para hidratar la garganta y las vías respiratorias en general. Además, hace que las flemas se vuelvan más fluidas y, por tanto, más fáciles de expulsar. Para ello, hay que poner a hervir entre uno y dos litros de agua y después, tras cubrirse la cabeza con una toalla que retenga el vapor, asomarse al recipiente y respirar el vapor.
Si se añaden al agua algunas gotas de aceite esencial de eucalipto o directamente las hojas, el efecto será aún mejor. Las nebulizaciones también se pueden aplicar con una mascarilla especial para ello que cubre la nariz y la boca. Esta opción es buena para evitar posibles quemaduras con el agua hirviendo o si se va a aplicar a niños.
Beber mucha agua
Beber dos litros de agua al día parece ser un consejo muy trillado pero es que resulta muy eficaz en los casos de acumulación de flemas en la garganta. El agua hidrata las secreciones que están atrapadas en la garganta y facilita su expulsión mediante el reflejo de la tos.
Sin embargo, no tiene por qué ser agua, pueden ser tés o cualquier líquido fluido ya que tendrán el mismo efecto para expulsar las flemas de la garganta.
Jengibre y canela
El jengibre es muy útil para eliminar infecciones tanto de la garganta como del resto de las vías respiratorias debido a sus propiedades antibacterianas. Para beneficiarnos de ellas tan solo hay que mezclarlo con canela y añadirlo a un vaso de agua caliente. Tras removerlo, se añade una cucharada de miel para suavizarlo y ya está listo para consumir. El agua caliente se pude sustituir por una infusión de manzanilla si se desea.
Ajo
El ajo es uno de los remedios caseros universales pues tiene tantas propiedades que sirve prácticamente para todo. La alicina que contiene tiene propiedades antifúngicas, antibacterianas y antivirales por lo que ayuda al organismo a luchar contra cualquier agente infeccioso. Al reducirse la infección, se reduce también la flema. Hay que consumirlo crudo en las comidas para notar sus beneficios.
Miel y pimienta
Esta mezcla aparentemente tan extraña es muy útil a la hora de deshacerse de las flemas en la garganta. Su consumo es tan sencillo como añadir una pizca de pimienta blanca o negra a una cucharada de miel y consumirla tal cual. La pimienta actuará sobre las infecciones mientras que, por otro lado, la miel se encargará de suavizar la garganta eliminando la irritación. Este remedio se puede tomar hasta dos veces al día por un periodo máximo de cinco días.
Compresas tibias
La aplicación de compresas tibias sobre el rostro es un método muy útil en especial en personas que no pueden tomar medicación como, por ejemplo, las mujeres embarazadas. Deben colocarse en los pómulos y los senos nasales para que el calor actúe como vasodilatador, abriendo así las vías respiratorias y favoreciendo que las flemas salgan con fluidez.
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