Tener encías con sarro es un problema más común de lo que se cree y que debe solucionarse cuanto antes. No solamente causa una mala impresión ante los demás, ya que afecta a la estética general del rostro, sino que podría provocar enfermedades graves que pueden llegar a afectar a todo el organismo.
En este artículo vamos a explicar el problema de las encías con sarro y las formas para eliminarlo de forma que la salud bucodental se mantenga intacta así como las relaciones con el resto de la gente.
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¿Por qué tengo las Encías con Sarro?
Existen varias causas por las que el sarro se acumula en las encías. Es importante conocer qué es lo que ha favorecido la aparición de sarro en las encías para así determinar la mejor forma de eliminarlo y, sobretodo, de evitar que vuelva a suceder.
- Mala alimentación. Llevar una dieta equilibrada es imprescindible para tener una buena salud bucodental. Consumir un exceso de azúcares, grasas saturadas o alimentos refinados puede favorecer la aparición de sarro debido a la actividad de las bacterias.
- Deficiente higiene bucodental. Si no se siguen los mínimos de limpieza de la cavidad bucal, esto es, cepillarse los dientes al menos dos veces al día y tratar de complementarlo con el uso del hilo dental y de enjuague bucal, las bacterias y los restos de comida acaban acumulándose en las encías y favoreciendo la aparición del sarro. El cepillado de dientes, además, debe hacerse con la técnica correcta para alcanzar las zonas de difícil acceso.
- Consumo de café y té negro. El exceso de consumo de estas dos bebidas provoca que las bacterias se acumulen con mayor facilidad creando así la aparición de sarro.
- Tabaquismo. Fumar es un hábito que favorece la entrada de toxinas en la boca. Esto hace que se multipliquen las bacterias con mucha facilidad y que, por tanto, se desarrolle la placa bacteriana y posteriormente, el sarro.
- Medicamentos. Hay algunos medicamentos que hacen que el sistema inmunológico se debilite y que, por tanto, las bacterias se desarrollen con más rapidez. Esto acaba provocando que tarde o temprano, prolifere el sarro en las encías.
- PH de la saliva. El nivel de acidez de la saliva también interviene en la aparición de sarro en las encías ya que, cuanto más ácido (menos de 5), más propicio es el ambiente dentro de la boca para que proliferen las bacterias y que formen el sarro. En este sentido, las bebidas gaseosas son muy perjudiciales ya que aumentan la acidez del PH.
¿Qué es el Sarro?
El sarro, también conocido con el nombre de cálculo dental, es un depósito duro de color amarillo-parduzco que proviene de la placa bacteriana. Esta placa pegajosa y blanca se forma tras una excesiva acumulación de bacterias, restos de comida y partículas de desecho que se solidifican por efecto de la saliva en el caso de no llevar a cabo una correcta higiene dental.
Cuando el sarro no es eliminado, las bacterias comienzan a liberar toxinas dando lugar a una grave enfermedad llamada periodontitis y que puede llegar a causar la pérdida de los dientes a causa del deterioro de los tejidos y el hueso que los sostienen.
Consejos para Quitar el Sarro de las Encías
El principal medio para eliminar el sarro de las encías es acudir a la consulta del dentista para que éste lleve a cabo una limpieza bucodental profesional. De hecho, esta limpieza debería realizarse una vez al año independientemente de que hayan aparecido problemas en los dientes o en las encías.
En ocasiones surgen dudas en torno a las limpiezas profesionales ya que hay quien teme que sean dolorosas o que acaben por dañar el esmalte de los dientes. Ninguna de las dos cosas es cierta ya que con la aparatología y los productos utilizados hoy día en las consultas de los odontólogos no existe ningún riesgo de ese tipo.
Siempre habrá que realizar una limpieza profunda frente a una limpieza superficial ya que ésta última solamente eliminar el sarro visible, obviando el que se acumula en la parte trasera de los dientes y el que no se ve a primera vista.
Además, hay otras medidas que se pueden tomar no solo para ir eliminando poco a poco el sarro de las encías sino también para evitar su aparición.
- Cuidar la alimentación. Antes se ha hablado de los alimentos nocivos para la salud de las encías. Todos ellos deben ser sustituidos por frutas y verduras frescas, en especial las espinacas y las manzanas, las cuales hay que comer a mordiscos y con piel para eliminar el sarro. También son eficaces el melón, las fresas, la naranja y el plátano. De estas dos últimas puede aprovecharse la piel para frotarla por las encías y ayudar a limpiarlas.
- Tomar sésamo. El sésamo tiene una gran cantidad de calcio por lo que ayuda a fortalecer las piezas dentales y, por tanto, las encías. Además, al consumirlo arrastra consigo bacterias y limpia la cavidad bucal.
- Sustituir el azúcar por la stevia. La stevia es una planta de la que se obtiene un edulcorante natural que puede sustituir al azúcar refinado que se suele consumir. No solo no sirve de alimento a las bacterias como el azúcar sino que, además, ayuda a evitar las caries ya que protege los dientes.
- Enjuagarse con agua con sal. La sal está compuesta por un gran número de minerales que fortalecen los dientes, neutralizan los ácidos perjudiciales de la boca y además, eliminan las bacterias. Estos enjuagues se pueden hacer cada día e ir reduciendo la frecuencia poco a poco. En unos días se comienzan a ver las encías más limpias y sanas.
- Usar carbón activado vegetal. Este producto que se vende en herbolarios no solo ayuda a prevenir enfermedades dentales sino que también ayuda a limpiar y a blanquear dientes y encías. Para usarlo simplemente hay que cepillarse los dientes con él durante un par de minutos y enjuagar. No conviene usarlo a diario ya que puede dañar el esmalte.
- Enjuagarse con aceite de girasol. Este aceite es muy útil para limpiar en profundidad los dientes y arrastrar toxinas.
- Cepillarse con agua oxigenada o bicarbonato. El hecho de cepillarse los dientes con cualquiera de estos productos, ya sea por sí solos o mezclados con la pasta de dientes habitual, hará que poco a poco el sarro se vaya reblandeciendo hasta que desaparezca. Ambos productos pueden usarse también para hacer enjuagues tras disolverlos en agua y añadiendo unas gotas de limón. Eso sí, no puede abusarse de estos remedios porque pueden dañar el esmalte de los dientes.
- Enjuagarse con zumo de limón. El limón es antibacteriano y además es uno de los blanqueadores naturales por excelencia así que es un producto muy adecuado para eliminar el sarro de las encías. Hay que mezclar el zumo de medio limón en un vaso de agua tibia y realizar enjuagues. Solamente se puede repetir una vez a la semana porque el ácido del limón puede dañar las piezas dentales.
- Usar pasta de perejil. El perejil es muy útil para luchar contra la acumulación de sarro en los dientes y en las encías. Para usarlo, hay que tomar algunas hojas de perejil fresco y machacarlas. Después, se mezclan con un poco de agua para hacer una pasta que se tiene que colocar directamente sobre las encías. Tras dejar actuar unos cinco minutos, hay que enjuagarse la boca con agua tibia.
- Hacer un enjuague casero. Existe un remedio casero que sirve para ablandar el sarro poco a poco y facilitar su eliminación. En una taza de agua hay que mezclar media taza de bicarbonato, diez gotas de aceite esencial de limón , cuatro cucharadas de glicerina vegetal y una cucharadita de gel de aloe vera. Esta mezcla se puede usar una o dos veces al día.
- Aplicar clavo de olor. El clavo de olor es uno de los productos que mejores efectos tiene sobre cualquier afección que se encuentre en la cavidad bucal, desde aliviar infecciones hasta eliminar el mal aliento o reducir el sangrado. Y por supuesto, también se puede emplear para deshacer el sarro. Tan solo hay que aplicarlo sobre las encías en forma de aceite esencial.
- Enjuagarse con aceite de coco. Los enjuagues con aceite de coco deben ser un poco más intensos que los que se realizan con otros productos pero merece la pena el resultado. Este aceite debe ser enjuagado al menos durante veinte minutos. Transcurrido este tiempo, hay que escupirlo y cepillarse los dientes con normalidad. Hay que repetirlo diariamente hasta que el sarro comience a desaparecer con el cepillado.
- Usar pasta de dientes fluorada y con control de sarro. La concentración de flúor en los dientes fortalece los dientes y evita la formación de caries. Además, protege tanto a dientes como a encías de la aparición de sarro. Por otro lado, los pirofosfatos y el citrato de zinc entre otros componentes evitan que el sarro se acumule por lo que ayuda a que de deshaga.
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